Los hoteles en Canarias se construyen en zonas donde no está permitido

Según establece la Ley 4/2017, de 13 de julio, del Suelo y de los Espacios Naturales Protegidos de Canarias (art. 100), un proyecto turístico sólo puede desarrollarse en zonas reservadas al desarrollo turístico que garanticen la protección de los espacios naturales. Cualquier proyecto de construcción turística que se lleve a cabo en Canarias debe cumplir con todos los requisitos establecidos en la mencionada normativa. Además, desde 2003 se han implantado restricciones sobre la construcción de nuevos hoteles, haciendo que la planta alojativa tradicional se reduzca durante la última década (-51.113 plazas entre mayo de 2015 y mayo de 2025), según datos del Instituto Canario de Estadística (Istac).
Imprimir

Otros mitos, realidades y matices

Según datos del Observatorio Turístico de Canarias, el 60 % de las áreas turísticas de litoral presentan densidades inferiores a la media regional (121.461 viajeros alojados por km²). Además, un 21 % del suelo sigue siendo libre (no consolidado por edificación) y un 14,5 % corresponde a espacios públicos.
Entre 2014 y 2017 el turismo —una de las principales actividades económicas del archipiélago— representó entre el 12,8 % y el 16,5 % del consumo eléctrico total. En 2019, el sector de hostelería, alojamiento y restauración concentró el 15,9 % de la demanda, por debajo del 35,7 % del uso doméstico y del 18,2 % correspondiente a la administración y otros servicios públicos. En los hoteles, la electricidad se destina principalmente a climatización (30,8 %), agua caliente y piscinas (22 %) y lavandería y cocinas (21,2 %), mientras que las habitaciones e iluminación suponen el 10,5 % y el 8 %, respectivamente.
La llegada de turistas internacionales y nacionales a Canarias por vía aérea se mantiene estable a lo largo del tiempo. Entre 2019 y 2023 el incremento fue del 2,9 %, y entre 2023 y 2024 del 6,3 %. Aunque el número total de turistas aumentó un 4,6 % en enero de 2023 y un 15,1 % en enero de 2024 respecto a enero de 2019 (año de referencia prepandemia), el patrón estacional —con picos en meses como enero, marzo y diciembre— permanece prácticamente inalterado, sin modificar la distribución temporal de la demanda turística.
En la última década (2015–2025), las afiliaciones a la Seguridad Social en actividades vinculadas al turismo se han mantenido entre el 22% y el 25 % del total. Si se toma como referencia el mes de enero para cada año entre 2015 y 2025, los servicios de alojamiento han representado alrededor del 35% del empleo turístico registrado en la Seguridad Social, mientras que la restauración y actividades similares han concentrado aproximadamente el 39%.
Según los datos de ISTAC, los turistas alojados en hoteles gastaron un 121% del promedio total en el primer trimestre de 2025 y un 115% en el segundo, situándose por encima de la media. Además, su gasto diario fue un 30,5% mayor que el de los turistas en apartamentos turísticos en el primer trimestre de 2025, y un 24,1% superior en el segundo trimestre.
En Canarias, el número total de plazas alojativas tradicionales (hoteles y apartamentos) se ha reducido en más de 51.000 en la última década, según el Istac. No obstante, el crecimiento de la oferta turística se ha sostenido gracias a las viviendas de uso turístico, que según Exceltur concentran el 80% del incremento desde 2009. Entre 2019 y 2024, estas pasaron de 162.054 a 202.500 plazas (+25%), mientras que los hoteles apenas crecieron un 2,9%.
Scroll al inicio